Los Insectos No Están en el Menú: Por Qué Comer Insectos No Salvará al Planeta
Published 5 days ago in News

Los Insectos No Están en el Menú: Por Qué Comer Insectos No Salvará al Planeta

A pesar de sus beneficios ambientales, comer insectos enfrenta un obstáculo importante: el profundo asco que la mayoría de las personas simplemente no puede superar.

Profile picture of Martina Osmak
Martina Osmak
Director of Marketing

Insectos: La proteína ecológica que nadie quiere

En teoría, cambiar el bistec por grillos suena como una victoria para el planeta. Los insectos utilizan mucha menos tierra, agua y recursos que el ganado tradicional, lo que los convierte en una solución atractiva para frenar el cambio climático. Pero la realidad no es tan simple.

Un nuevo estudio publicado en npj Sustainable Agriculture revela que, para la mayoría de las personas, comer insectos es un rotundo no—especialmente en los países occidentales donde la idea provoca más asco que entusiasmo.

El argumento ambiental a favor de comer insectos

Los números no mienten. Criar ganado, cerdos y pollos tiene un gran impacto en el medio ambiente. En contraste, los insectos como grillos, hormigas y saltamontes pueden ser criados con recursos mínimos, ofreciendo una fuente de proteína más ecológica.

¿Hamburguesas de insectos? La mayoría de la gente simplemente no puede soportar la idea

A pesar de las ventajas ecológicas, la gente simplemente no se anima. Las encuestas muestran:

✅ 91% de las personas están abiertas a carnes a base de plantas
❌ Solo el 20% consideraría comer insectos

El asco cultural es profundo. Como explica el coautor Dustin Crummett, “cambiar tradiciones culinarias arraigadas y reacciones de asco profundamente incrustadas es difícil de hacer desde arriba hacia abajo.”

En resumen: los argumentos morales y los lemas de sostenibilidad no son suficientes para cambiar lo que hay en los platos de las personas.

Realidades del mercado: Insectos para animales, no para humanos

El mercado ha hablado, y la cría de insectos está en auge—pero principalmente para alimentación animal, no para comida humana. Aparte de algunas compañías de barras de proteína que esconden grillos en sus bocadillos, hay pocas señales de que los insectos reemplacen a la carne de manera significativa.

Aún en países con una historia de consumo de insectos, la demanda global sigue siendo pequeña en comparación con el consumo de carne, que aún sigue en aumento en todo el mundo—especialmente en regiones recién adineradas como China.

El futuro: Enfocarse en lo que funciona

Los gobiernos han sido lentos en actuar sobre la reducción de carne, temiendo represalias públicas. Dinamarca es una excepción, implementando políticas para promover dietas basadas en plantas.

Crummett está de acuerdo: “Tienes que encontrarte con la gente donde está. Haz que las cosas sean sabrosas, asequibles y fáciles—no solo tratar de hacer que se sientan culpables.”

Fuente: https://www.theguardian.com/environment/2025/jun/25/eating-insects-meat-planet